1er día Mexico D.F

Tururu llegamos antier a México y nos enfrentamos a la gran capital, México D.F. llena de sueños, posibilidades, esperanzas… contaminación, ambulantaje, tratos chuecos y tráfico. Sin olvidar las infinitas protestas que no tienen ni pies ni cabeza, sus laberintos sin salida, los segundos pisos de los periféricos y las entretenidas y largas “negociaciones” de regateo constante. Haaaa… bonita bonita ciudad, tengo que admitir que en verdad está mejor de lo que me esperaba, y tiene un lindo clima (por lo menos los días que estuve) y mucha vegetación, hace mucho que no me paseaba por ahí y creo que es genial. Una de las cosas que más me impresionó fue el tráfico, la manera de manejar y de cruzar la calle, todos son unos verdaderos animales. Un caos ordenado se le podría decir, ya que a pesar de que se pasaban rojos, no hacían caso a las indicaciones, iban en sentido contrario, casi atropellaban a los peatones, se quedaban a media calle y paseaba una protesta de SME por las calles; no vi ningún choque ni atropellamiento, lo cual merece un aplauso de mi parte u.u (pero solo uno). Cuando llegamos al aeropuerto de México, nos recogió un chofer que al parecer nos había asignado un compa de mi papá, un BMW blindado azul… ningún botón de los millones que tenía se salvó de ser apretado por mí. Al llegar al hotel no sé si habrá sido mi “buena suerte” o el hecho de que mi papa viva mas en hoteles que en su casa pero nos mandaron a un piso nivel “ejecutivo” (que disque muy fancy pants) el cual tenia incluido un “lounge” con canapés y comidilla, menudo cuarto que nos tocó; una agua de 330 mL costaba 20 pesos, enfermos del cerebro diría yo, muy enfermos. Al parecer la vida no piensa que hemos tenido el suficiente contacto con los federales de esta ciudad y su constante acoso, no, pues al parecer gracias a ese estúpido piso para gente “fancy” llego un embajador de quien sabe chingados donde a quedarse en la habitación de junto la cual estaba siendo vigilada 24/7 con inútiles armados con metralletas más grandes que yo. Bola de Idiotas. En fin, al final termine pensando que ese hotel era una completa y gran tontería. Al día siguiente Manuel, el chofer nos recogió, y nos abrió la puerta y todo, pero al final descubrí que yo no fui hecha para ser atendida ya que llegaba el carro y Manuel se apuraba para abrirnos la puerta cuando yo ya estaba adentro moviéndole a mas botones, y creo que es triste que a veces las personas no puedan ni abrir una miserable puerta.  Fuimos al consulado japonés para sacar mi visa de estudiante, cita a la cual llegamos sonreímos y momentos después nos dijeron; “recojan su visa a las 6”. Gracias a lo inesperadamente rápido que fue sacar una visa nos fuimos a la “ciudadela” un tianguis de manualidades Mexicanas, Amo ir a esos lugares, Amo comprar cosas ahí… y odié tanto el haberme enfermado después de 30 min de estar ahí T__T estúpida altitud.
Ya que desperdicie la mitad de mi mañana en esa ajena ciudad acostada en mi cama sufriendo, mi madre me dió quien sabe que químico para callarme y nos fuimos a comer a un centro comercial de ahí; el cual tenía las tiendas mas fancys… que te encuentras en cualquier centro comercial del paso, y al triple de caro. Lo más chistoso fue la gente, la manera de hablar de los chilangos es digna de ser la burla de todo México (territorio Telcel) y su actitud de “all High Myghty” y “Too Cool For you”, haciéndome recordar una vez más la razón por la cual el mundo entero odia a los chilangos (no a todos, solo a algunos).
Después de estar un rato en el Centro Comercial comenzó a llover una llovizna tan ligera y deliciosa, pero a pesar de mis desesperadas protestas, mi madre prefirió tomar un tacsi y regresamos al hotel para después ir por mi visa e ir al doctor.